Hoy deseo compartir con ustedes una verdad eterna que está en el libro de Juan 5:8 “Jesús le dijo: Levántate, toma tu camilla y anda”.
Este texto está hablando de lo que pasó con un hombre conocido como el paralitico de Betesda, quien llevaba 38 postrado por causa de una parálisis severa.
Jesús lo encontró cerca a un estanque llamado Betesda porque existía la creencia que un ángel descendía de tiempo en tiempo al estanque y tocaba las aguas y el primero que descendiera al agua después del toque del ángel quedaba sano de su enfermedad.
Pero como el paralitico no podía moverse por sus propios medios, ni tenía quien le ayudara, engrosaba la lista de los que se pasan la vida viendo como otros prosperan, como otros reciben sus milagros y él no.
Pero me llama la atención que aunque el significado del nombre Betesda era “Casa de misericordia”, en aquel lugar yacía una multitud, de enfermos, cojos, ciegos.
Pero pienso en cuantas iglesias o casas de misericordia existen actualmente donde abundan una multitud de personas que esperan también que ojala un día el ángel del señor descienda, los toque y pueda acabar de una vez por toda con tanto sufrimiento.
Pero no vino ningún ángel sino tres palabras de los labios de Jesús para este hombre: Levántate, toma tu camilla y anda, tres palabras que marcaron la diferencia, tres palabras que fueron suficientes para dejar atrás 38 años de frustración.
Sabe que hoy día mucha gente sigue llenando los templos, esperando una visitación especial del señor, pero la palabra que se predica en los púlpitos que es donde está el milagro muchas veces no la reciben.
¿Cuántas personas, familias, economías, matrimonios, o relaciones, se encuentran también paralizadas o estancadas. Bueno el señor te envía las mismas tres palabras que sanaron al paralitico: Levántate, o deja el pasado atrás, Toma tu camilla, O sea toma el control de la circunstancias y Anda, es decir ponte en marcha, manos a la obra porque la fe sin obras es muerta.
Siempre ten presente que “SI TUS SUEÑOS DESEAS ALCANZAR LAS EXCUSAS DEBES ELIMINAR”.
Humberto Cancio.
Comments