“LO QUE EL HOMBRE TEME ESO LE SOBREVIENE”. Job 3:25

Job 3:25 “Lo que más temía, me sobrevino; lo que más me asustaba, me sucedió”.

Le pido a Dios con todo mi corazón que, así como le dio a Job la revelación para haber podido entender este principio espiritual tan importante, ilumine nuestro entendimiento para nosotros también poder comprenderlo.

Este es un descubrimiento poderoso el que Job hizo, después de haber vivido esa tragedia tan desastrosa que no solo le arrebato a sus hijos, sino a su familia y todo lo que tenía. El dijo: “Lo que presentía eso me sobrevino”, es decir el temor es una especie de fe contraria.

El temor activa el reino espiritual y hace que lo que temes venga a tu vida. Muchas de las cosas que nos han pasado y nos siguen pasando, no es que Dios las haya permitido es que nosotros mismos las creamos a través del temor.

Job concluyó que todo lo que le paso fue lo que él presentía que le iba a pasar, el enemigo no puede crear o hacernos mal si nosotros no se lo permitimos.

Así que deje de estar temiendo que lo van a despedir porque muy seguramente así va a ser, deje de temerle a la soledad porque lo más seguro es que termine quedándose solo(a), no le tema a la muerte, ni que a sus hijos les va a pasar algo malo porque seguramente eso que teme se hará realidad.

Hay personas que se la pasan diciendo que tienen como un pálpito o presentimiento, eso no es de Dios, es demoníaco; ahora usted me preguntará: ¿Entonces que hago?, confíe en Dios, revierta lo que presiente, crea que a usted solo le pasa lo mejor, la FE es el lado opuesto del temor.

“Por causa del temor y la ansiedad, existe en el mundo una generalizada y malsana tendencia a la fatalidad. Una constante inclinación hacia el infortunio y una obsesiva predisposición a la calamidad. El temor es una especie de fe opuesta que atrae a nuestra vida lo que más nos amedrenta. La fe activa lo que crees, el miedo lo que temes”.

Humberto Cancio.