Hoy me gustaría meditar en la cuarta palabra que Jesús exclamo en la cruz antes de morir: “Elí, Elí, ¿lama sabactani? Esto es: Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado”.
Muchos se preguntan pero porque Dios padre abandono a su hijo?. ¿Acaso estaba siendo un mal padre?, Nooo ….Lo que paso fue como Jesús estaba llevando en su cuerpo el pecado de la humanidad y como el pecado separa al hombre de Dios, por eso con mucho dolor tuvo que abandonar a su hijo cuando este más lo necesitaba.
Yo no se si tu historia sea similar a la de Jesús…El fue abandonado por el padre? Y tu?...¿Quien te abandono?...Tal vez fueron tus padres, o tu cónyuge, o tus hijos, ¿Quién te dejo solo cuando mas lo necesitabas?... No me respondas… pero estas son heridas que taladran el alma.
Tal vez yo no me alcanzo a imaginar lo grande de tu dolor, pero he venido a recordarte que Jesús si entiende por lo que estás pasando porque a él le toco vivir lo mismo que tu.
“Es posible que hoy te estés sintiendo así, solo, pero eso no significa que realmente lo estés. Jesús prometió antes de morir que no te dejaría huérfano y envió a su Espíritu santo para que estuviera con nosotros todos los días de nuestra vida hasta el fin del mundo.
Nunca dudes de la presencia de Dios en tu vida, jamás pienses que Él se ha apartado de ti, Jesús fue abandonado para que tu no te quedaras solo nunca. El prefirió ser abandonado por el padre antes que abandonarte a ti.
Dios es un padre bueno que por ninguna circunstancia abandona a sus hijos. Recuerda esto siempre: “Cuando más prolongada sientes su ausencia, es cuando más cerca esta su presencia”.
Humberto Cancio.
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